Comienza la aventura. Mañana partimos hacia Sabiñánigo para participar en la Quebrantahuesos por etapas. Será mi primera gran ruta en bici tan sólo un mes después de comprarme una Aqua de Orbea, mi primera bicicleta de carretera tras muchos años deseando hacerme con una.
Por delante nos quedan dos durísimas jornadas en las que tendremos que afrontar ascensiones de más de 30 kilómetros y por encima de los 1.600 metros de altitud. Para abrir boca el sábado nos esperan 146 kilómetros y 2520 metros de desnivel acumulado con las ascensiones a los puertos de Somport (1640m), Ichère (674), Lie (600), estos dos últimos cortos pero intensos, y la última ascensión al mítico Marie Blanque (1035m), la dama pirenaica.
Si todo ha ido bien, la jornada del domingo será más ‘tranquila’, con subidas a los puertos de Portalet (1794m) Hoz (1272m), en una etapa de 76 kilómetros y 1.920 metros de desnivel acumulado. Así, gracias a la invitación de Aramon Bike, entidad organizadora de la QH junto a la Peña Ciclista Edelweis, tendré la oportunidad de (intentar) ascender varios puertos de montaña con los que año tras año he disfrutado y sufrido viendo cómo los coronaban los grandes ciclistas profesionales durante las bochornosas tardes del mes de julio.
No sé si desde allí tendré fuerzas de escribir y contar cómo avanzan las dos jornadas pero si internet no me falla, ya os lo iré transmitiendo (bonita palabra) por Facebook, Twitter y Ciclismo Aficionado.
¡Qué la fuerza (y el tiempo) nos acompañe!
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