El espíritu de los Belda

A partir de ahora, y si es posible, en esta página de Ciclismo Aficionado vamos a poder disfrutar habitualmente de los reportajes que mi amigo Endika Río publica todos los martes en el diario EL CORREO. Esta semana nos deja un texto sobre un ciclista que ya tuvimos por estas páginas hace algunas semanas.

TEXTO: ENDIKA RÍO / EL CORREO
FOTOS: FUERTEVENTURA

De tal palo, tal astilla. Es lo que se suele decir cuando un hijo se parece a su padre, y es perfectamente aplicable para David Belda, corredor del Fuerteventura-Canarias, y para Vicente Belda, director del conjunto canario en estos momentos y ex mánager del extinto Kelme. El físico de David es muy similar al que su padre dejaba ver por el mundo del ciclismo hace un cuarto de siglo. Ambos son pequeños de estatura, pero con mucha fuerza en sus piernas. David sigue los pasos de su padre y es en la montaña donde mejor se defiende. «Él era más guerrillero, yo soy más conservador, controlo más el terreno», aseguró el alicantino, a la par que añadía que las condiciones en el ciclismo «han cambiado mucho».

David, que hoy celebra su 25 cumpleaños, está intentando hacerse un hueco en el ciclismo y dar más lustre al apellido Belda. Pero siempre por méritos propios. Sin ayudas de terceros. Aunque últimamente, más que beneficios, apellidarse Belda le ha perjudicado. «Me ha afectado a la hora de buscar equipo profesional para esta temporada. Lo tenía apalabrado con el Contempolis-Murcia, pero por ser hijo de quien soy, al final nada», manifestó con pena el alicantino, que está acostumbrado a que le comparen con su padre: «Llevo muchos años y ya no me afecta».

El alicantino ha tenido que dar un paso atrás en su carrera y se ha visto obligado a recalificarse en el campo amateur. Este retroceso ha ido de la mano del Fuerteventura-Canarias, que, sin ir más lejos, la pasada temporada estuvo corriendo la Vuelta al País Vasco (UCI Pro-Tour). «Han tenido que bajar el presupuesto y formar un equipo continental», dijo David Belda con pesar, pero con ganas de coger impulso y volver al profesionalismo: «Otros jóvenes lo han dejado, pero yo aún tengo ilusión para continuar».

El ciclista del Fuerteventura espera que ésta sea una campaña de transición. «Estoy triste porque me gustaría volver a ser profesional, y este año voy a trabajar para ello», apuntó el ciclista, que esta temporada correrá con cierta ventaja sobre el resto del pelotón: «Noto que tengo más fondo y resistencia, además de más experiencia en carrera». El ciclismo está en crisis y la recalificación de David Belda y del Fuerteventura es una consecuencia. Y el alicantino es plenamente consciente: «En lugar de salir en los medios las victorias de los españoles salen los casos de dopaje y así, ¿quién va a poner dinero en el ciclismo? Nadie, porque no interesa».

Le gusta el País Vasco
El alicantino es un enamorado de las citas en el País Vasco. «En aficionados llega a haber más público que en carreras como la Vuelta a Murcia o a Valencia», señaló. Esta temporada ya ha saboreado las mieles del éxito en la Clásica de Aiztondo. «Las carreras allí tienen más repercusión». La siguiente meta es la Clásica Santa Cruz, en Legazpia: «Me gusta mucho esa cita, sobre todo porque en Descarga se hace pasillo a los corredores y eso motiva mucho».

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